sábado, 10 de octubre de 2015

MÉTODO vs. INSPIRACIÓN (Foro de Discusión de Filosofía del Diseño)


MÉTODO VS. INSPIRACIÓN

(Foro de Discusión de Filosofía del Diseño)



Las preguntas de si existe diseño sin inspiración y si se puede realizar diseño sin método me recuerda la famosa pregunta de "¿qué fue primero: el huevo o la gallina? A decir verdad es una cuestionable que ha surgido con un acercamiento al análisis de situaciones que se generan a través de procesos en forma circular. Lo importante de este análisis en el diseño es que el resultado en función del diseño no se hace en esos parámetros, sino más bien en cuanto a la respuesta y retroalimentación del receptor: el sujeto más importante de la comunicación visual que elaboramos.

En donde sí es necesario analizar si un método - planteado como tal - es o no válido para realizar diseño, y si se puede generar diseño sin inspiración es en el lado del emisor: nosotros, como diseñadores, debemos cuestionar cómo responder ante la necesidad de estímulos visuales de los usuarios finales. Pero, ¿cómo generar inspiración y un método para diseñar? Las herramientas son infinitas. Cada sujeto puede utilizar infinidad de variables para someter a su juicio y de los receptores si los canales, los medios y los mensajes cumplen con su función. La inspiración según la Real Academia Española (2015), es “enardecerse y avivarse el genio del orador, del literato o del artista con el recuerdo o la presencia de alguien o algo, o con el estudio de obras ajenas.” Me parece la definición más eficaz, ya que sostiene que es el estudio de obras ajenas, y agregaría también, de los entornos. El nivel cultural, la educación y la forma de aprendizaje nos dictarán cómo la inspiración y el método influyen en nuestro trabajo.

Por otro lado, los métodos siempre existen, aún si no los conocemos los aplicamos, y considero que esto se da también por la forma de aprendizaje que adquirimos. Lo que sí es importante, es que el método que aplicamos no siempre puede ser el más efectivo. De eso se supone la academia, brindar todas esas herramientas para saber elegir la más adecuada según el problema que deseamos solucionar o minimizar.  No se puede hablar de si el método nació antes del diseño, o de donde nació la inspiración, porque todo evoluciona. Las formas de aprendizaje se han expandido al conocer y estudiar mejor, eso sí. Prefiero elaborar en torno a que el diseño nace de un estudio, que nos dictará y brindará directrices sobre cómo generar mejor diseño, ergo, generaremos comunicación visual que se acomode al público al que nos dirigimos. Sucede que como diseñadores, no solemos tomar en cuenta que el diseño responde a factores conductuales, somáticos, cognitivos, geográficos y demográficos no solo del grupo objetivo, sino también de nosotros mismos. Es importante que a la hora de entender el diseño, entendamos que este responde a contextos culturales, nexos semántico – lingüísticos y cultura visual.

Por esto, puedo sugerir que el diseño sin método y sin inspiración si se puede generar. Muy diferente es que no sea lo más conveniente; lo más idóneo y ético. Como comunicadores debemos entender el porqué del diseño, tomando en cuenta que quizá en esta carrera, el cliente no siempre tiene la razón, agregaría: porque muchas veces la solución que nos plantean, no es a un problema que tienen. Como diseñadores es importante empezar a educar a nuestros clientes, no siempre respondiendo con lo que nos piden, sino estudiando su conveniencia. Claro, si es que consideramos y amamos esta nuestra profesión.